martes, 24 de enero de 2017

Dos científicos de renombre demuestran que el alma no muere sino que retorna al Universo.


¿No son fascinantes estas declaraciones? Pues al menos yo lo creo así, antes igual también ocurría… (hablo de este tipo de declaraciones) el hecho de que doctores, científicos y expertos hablen de estos temas abiertamente e investigasen el proceso de la muerte y la existencia del alma.
 
Pero ahora, con la era de Acuario y la información a la par de Internet, nos abre las puertas al conocimiento y a la difusión de los mismos. Este es el caso que ahora os contaré. 

El de dos científicos de gran renombre que han declarado que pueden probar que el alma existe. Uno de ellos es el Doctor Stuat Hameroff, que es profesor y guía en el Departamento de Anestesiología y Psicología, además de ser el Director del Centro de Estudios de la Conciencia en la Universidad de Arizona.

El otro personaje de esta gran historia es Roger Penrose, que es un distinguido matemático y físico de la Universidad de Oxford. Ambos doctores y científicos han estado trabajando en conjunto en la teoría cuántica de la conciencia desde el año 1996 hasta ahora, y que consistiría en probar que nuestras almas y su estructura están dentro de los microtúbulos, que se encuentran en nuestras células cerebrales.


Ellos describen el cerebro humano de una manera similar a un gran ordenador informático y biológico, abalando científicamente que sus conexiones sinápticas hacen de redes de información, llevando la misma de un lado para otro. A todo esto, le sumamos lo que ellos llaman ORCH- OR, que es un proceso de Reducción Objetiva Orquestada, y que con ello explicarían como las experiencias que vivimos desde nuestra conciencia vienen y nacen del resultado de los efectos de la gravedad cuántica en los microtúbulos. 

Según un estudio, cuando un paciente vive una experiencia cercana a la muerte, estos microtúbulos donde habitaría nuestra alma, pierden completamente el estado cuántico, pero sin embargo no pierden la información que contienen en ellos (osea nuestra alma) y no se destruye, sino que se transforma. 

Concluyendo con esto que el alma no muere, sino que retorna al Universo creador de donde viene. El Dr. Hameroff hizo una aparición en el programa de Morgan Freeman “Secretos del Universo” y explicaba que cuando el corazón de un ser humano deja de latir, los microtúbulos se paran, pero la información que hay dentro de ellos, osea el alma no se pierde, y que se distribuye de nuevo por el universo, explicando científicamente que el alma existe a modo de información dentro de esos microtúbulos.












Fuente: Despiertavivimosenunamentira

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